sábado, 12 de octubre de 2013

Un sueño que aún recuerdo

Hace un año aproximadamente tuve un sueño. Sí, todos soñamos, dirán. ¿Qué tiene de especial? Bueno, lo especial acerca de este sueño para mí es que a pesar del tiempo que ha pasado desde que lo tuve, sigo recordando cada detalle, lo cual, al menos en mí, no ocurre con frecuencia. 
Fue un sueño muy raro, no tenía sentido, pero bueno… los sueños casi nunca lo tienen:

Estoy junto a mis compañeros de clase en un paseo de fin de año en un hotel durante la noche. Tenemos la idea de salir a cenar, pero una señora que trabaja en el hotel (una especie de ama de llaves) no me deja ir y me manda a dormir. Estando acostado en la cama del cuarto empiezo a sentir miedo ya que de alguna forma estoy convencido de que ese es el cuarto de Emily Rose (la muchacha que está poseída en la película El Exorcismo de Emily Rose) lo cual no tenía sentido, ya que yo había visto la película y el cuarto de este hotel, con sus cuatro paredes de madera y su cama en el centro como único mueble, no se parece en nada al cuarto de la chica de la película. Pero de todas formas siento miedo.

Decidido a gastar mi tiempo de forma más productiva, salgo del cuarto y me encuentro con un pasillo largo, lleno de puertas bordó y paredes color verde sin ningún cuadro ni ningún tipo de decorado. Una puerta de una habitación enfrente a la mía se abre. De ésta sale una niña de unos doce años con largo pelo rubio, usando un vestido de apariencia de principios de siglo XX de color verde. Cuando se da vuelta, la reconozco: La familia de esta chica tiene un quiosco que está al lado del edificio en donde vivo, además ella había ido a mi misma escuela aunque estaba unos años más abajo que yo. 

Le pregunto entonces que está haciendo y me responde que piensa salir a pasear. Yo me extrañé, pues eran altas horas de la noche y era muy chica como para salir sola a estas horas. Al preguntarle si sus padres le permiten salir, ella responde que no, pero que no le importa y me invita a unirme a ella y pasear juntos.
Acepto su propuesta y comenzamos a caminar por el pasillo. Pero a los pocos segundos, aparece el ama de llaves que me había prohibido salir y nos dice que volvamos a nuestros cuartos. Al oír nuestra negativa, aparecen dos enormes guardias de seguridad o algo así. Eran dos hombres con trajes inmaculadamente blancos y debían de medir más de dos metros.

Rápidamente comenzamos a correr hacia el lado opuesto del pasillo, en donde encontramos una escalera que sube hacia el siguiente piso y un ascensor. La niña (no recuerdo su nombre) me dice que mejor nos separamos, así que ella sube corriendo las escaleras y yo me meto al ascensor. Rápidamente presiono el botón del último piso y el ascensor me lleva hasta allí. Cuando las puertas del último piso se abren, me encuentro con que no hay suelo, el ascensor está flotando en el aire y enfrente de mí está la estatua con forma de elefante que está ubicada sobre el techo del hotel (Yo ya sabía de la existencia de dicha estatua de alguna forma). Asustado, presiono el botón de planta baja y bajo hasta allí.
Cuando llego y las puertas se abren, me encuentro con el ama de llaves y los dos guardias, que me miraban con caras sorprendidas…

Desde acá no recuerdo nada más, así que posiblemente me haya despertado en este punto. 
Ahora, ¿por qué será que recuerdo este sueño todavía? No lo sé, pero supongo que debe tener algún significado que no logro descifrar. 
Creo firmemente que los sueños tienen un mensaje, y que por eso existen. Si no, ¿qué sentido tendría alucinar de forma tan vívida durante un período de tiempo en el que tenemos que descansar la mente?
Y nada, sólo quería compartir esta reflexión y este sueño tan particular con ustedes. ¡Nos vemos!  

Por: Emiliano Sánchez

1 comentario:

  1. yo tambien tengo un sueño que no logro olvidar a pesar del tiempo transcurrido, quien sabe que nos estaran diciendo, que significado tendra
    beso grande Emi!

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